DIEZMO Y OFRENDA



     PROGRAMA GENERAL:


I. Objetivo 1 Ofrendas antes de la ley:

   1) Caín y Abel.
   2) Abraham.
   3) Jacob.
   4) Disposición Humana.
II. Objetivo 2 Ofrendas en la ley:

    1) Disposición Divina.
    2) Obediencia del pueblo.
    3) Desobediencia del pueblo.
    4) Razones de Dios al establecer el Diezmo.

III. Objetivo 3 Ofrendas en el Nuevo Testamento:

    1) Leyes Vigentes.
    2) Ofrenda de la viuda.
    3) Ofrenda para los santos.
    4) Espíritu Neotestamentario de la ofrenda.
   

IV. Objetivo 4 Ofrendas en la mayordomía  integral de la vida:

    1) Con Espíritu de Sacrificio.
    2) Con sentido de adoración0.
    3) Cumpliendo una misión.
    4) Superando a la ley.


 Introducción: Haremos un recorrido por toda la Biblia desde Antiguo Testamento hasta el Nuevo Testamento y así aclararemos algunos puntos sobre los Diezmos y Ofrenda. Esperando la guía y ayuda del Espíritu Santo el cual nos guiara a toda verdad.






                                       Objetivo N°1

I. Ofrendas Ante de la Ley: En la palabra de Dios encontramos algunos detalles de interés que nos ayudan a comprender, antes de que Dios estableciera condiciones o disposiciones en relación con las ofrendas o los sacrificios, había algunos que ya lo practicaban, pareciera que la naturaleza humana tiende a disponer nuestro espíritu para acercarse a Dios.

1) Caín y Abel: Es muy conocido este caso descrito en (Gen. 4:18). Ambos estaban ofreciendo a Dios ante el altar que habían levantado, pero al parecer sus ofrendas no eran iguales pues Dios miró la de Abel con simpatía y menosprecio la de Caín. El apóstol Pablo en (Heb. 11) pone un poco de luz en este asunto al decir que Abel por la fe ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, y deducimos que no fue tanto la natural esa de la ofrenda la que provocó la diferencia, sino mas bien el espíritu con que se ofrendó. Desde el comienzo existen dos formas de ofrendar, el que lo hace por amor, regoc0ijo, y el que lo hace por necesidad. Como una obligación. Lógicamente Dios aprobará la una y la otra, pero la notable es la ofrenda voluntaria.

2) Abraham: No solo ofrenda a Dios por medio del sacerdote Melquisedec, sino que lo hace diezmando (Gen. 14:17-22), ésta es voluntaria, no encontramos leyes divinas.

3) Jacob: En el pacto de la promesa deja establecido que dará a Dios el diezmo de las bendiciones que recibirá (Gen. 28:20-22). Tampoco aquí encontramos leyes divinas.

4) Disposición Humana: La naturaleza del hombre le lleva hacia Dios. Todo ser humano siente la necesidad de un Dios; aun los salvajes nos han dado ejemplo; siempre en su soledad o en la quietud de su espíritu piensa y razona, halla un deseo de acercarse a Dios y adorarle. Solo el pecado en el corazón del hombre lo aparta de Dios.

                                                 
Objetivo N° 2

II. Ofrendas en la Ley: Dios ya tiene su pueblo, lo está guiando hacia la tierra prometida, los esta organizando espiritualmente, comienzan a observarse ahora las leyes divinas y dentro de ellas las que tienen que ver con las ofrendas, aunque había distintas formas de ofrendar.

1) Disposición Divina: (En Lev. 27:30), leemos "Y el diezmo de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto de los árboles, de Jehová es; es cosa dedicada a Jehová. En (Nehemías 10:37-38), se confirman las disposiciones sobre los diezmos, haciéndose notar que los levitas estaban obligados por la ley a diezmar, (Número 28:26). "Así hablaron a los Levitas, y les dirás; cuando toméis a los hijos de Israel los diezmos que os he dado de ellos por vuestra heredad, vosotros presentaréis de ellos en ofrenda medida a Jehová el diezmo de los diezmos" significa esto que no solo el pueblo de Israel diezmaba, sino que también debían hacerlo aquellos que estaban en el sacerdocio a casa de Jehová.

2) Obediencia del Pueblo: Por mucho tiempo el pueblo fue fiel a las leyes y muy en especial a las relacionadas con el diezmo. Aun luego del regreso de Babilonia cuando Nehemías encontró las leyes, respetuosamente las obedecieron. Eran leyes que debían transmitirse de padres a hijos y repetirse permanentemente en cada ofrenda para tenerlas frescas en la mente.

3) Desobediencia en el Pueblo: Hubo sin embargo períodos en que se olvidaban esas leyes. Dios atacó duramente a su pueblo en (Malaquías 3:8-9), encontramos ejemplo de esto.

4) Razones de Dios al establecer el Diezmo:

1. Reconocimiento: Recordemos que el pueblo de Israel venia de     la esclavitud de Egipto, se encuentra ahora con grandes bendiciones de parte de Dios. La tierra a la que fue llevada fluía leche y miel. En medio de tanta prosperidad, es fácil olvidarse de Dios. Cuando todo va bien, nos acordamos poco de Dios, por eso Jehová dispuso que todo habitante de Israel llevase a la casa de Dios la décima parte de todas sus bendiciones, y allí delante del sacerdote y frente a sus hijos, diese testimonio de lo que traía ante el altar era tan solo provisto de esta manera, el hombre recordaría siempre que todo lo que la tierra producía y todos los árboles daban, y la abundancia de sus bienes no obedecían a su capacidad, a su fuerza, a su sabiduría, sino que eran bendiciones de Dios, su Dios.

2. Sustento: La tribu de los levitas no tuvo heredad en el reparto de las tierras. Fue aportada para atender las necesidades de la casa de Dios. Ellos no tenían derecho a trabajar la tierra y a obtener los frutos de la misma. Dios entonces les autoriza para subsistencia. De esta forma Dios proveía sustento para sus siervos.

3. Igualdad: Al verse los levitas obligados también a traer el diezmo ante el altar, estaban en igualdad de condiciones que los demás hijos de Israel y ellos también debían tener ese sentido de reconocimiento hacia Dios, quien les preveía sus alimentos y satisfacía sus necesidades. Es cierto que la ofrenda de algún campesino seria mayor en cantidad que la del levita, pues éste último traía el diezmo del diezmo, sin embargo delante de Dios ambos contribuían  igualmente, pues los dos traían el diezmo de lo recibido como observamos. Hay en todo esto mas que una simple ley, hay toda una organización de tributos, bien estudiada y meditada, justa y razonable, que permitía al pueblo de Israel y a los levitas una subsistencia adecuada.

                                       Objetivo N°3

III. Dejamos el Antiguo Testamento, pues como sabemos las leyes continuaron permanentemente e incursionamos en el Nuevo Testamento en busca de la orientación neotestamentaria.

1. Leyes Vigentes: La ley divina había sido modificada en el tiempo de Jesús, deducimos por algunas expresiones del Maestro que más bien los hombres estaban dando cumplimiento imperfecto de la ley. Jesús no critica el diezmo, por el contrario, defendió la ley. En el Sermón del Monte (Mateo 5:17) dice "No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas, no he venido para abrogar, sino para cumplir".

2. Ofrenda de la Viuda: Este caso típico, relatado en (Marcos 12:41-44), y (Lucas 21:1-4). Pone de manifiesto un espíritu que no debemos olvidar en nuestras ofrendas, los ricos dijo el Señor, pusieron de lo que les sobraba, esta mujer viuda puso todo lo que tenía eran solo dos blancas, muy poco valor monetario, pero para Dios valía mucho, pues había dado todo.

3. Ofrendas para los Santos: Siguiendo adelante en el Nuevo Testamento, nos encontramos con que estaban pasando dificultades los santos de Jerusalén y las ofrendas fueron levantadas para la ayuda de los mismos Allí observamos la generosidad manifiesta de los hermanos al ofrendar, pues muchos dieron por sobre sus fuerzas, dándose primero al Señor. Que maravilloso pasaje éste que describe el Apóstol Pablo en (2da. Cor. 8:1-7). Aquí aprendemos el espíritu de solidaridad y generosidad de las Iglesias neotestamentarias.

4. Espíritu Neotestamentario de la Ofrenda: Quizás no exista un pasaje que describa con mas claridad el espíritu de la ofrenda neotestamentaria, como el que relata Pablo en (2da. Cor. 9:6-15).

   * En primer lugar: aclara que en la forma que sembramos, segaremos. Si lo hacemos con abundancia, obtendremos con abundancia, si lo hacemos con pobreza, con pobreza segaremos. Verdad ésta que no puede rebatirse.

   En segundo lugar: establece condiciones de la ofrenda. Debe dar con liberalidad como cada uno propuso en su corazón, pero tenga cuidado, dice no sea con mezquindad, ni por necesidad, pues Dios ama al dador alegre. Esta verdad debemos destacarla; nadie esta alegre si sabe que ha dado menos de lo que Dios espera de nosotros.

   En tercer lugar: destaca la grandeza y el poder de Dios para danos lo necesario de modo que aun tengamos en todo, todo lo suficiente, de modo que podamos abundar en toda buena obra. Realidad ésta que jamás debemos olvidar, pues pertenecemos a un Dios que todo lo puede, y que conoce nuestras necesidades.

   En cuarto lugar: Menciona algo muy importante. En la gratitud de quien recibe la ofrenda, gratitud hacia Dios porque lo posibilita; gratitud hacia el donante por su generosidad y todo esto en favor de quien da, pues Dios retribuye en generosidad. Por todo esto el apóstol rubrica su argumento con un sello inconfundible "Gracias a Dios por su don inefable". Esta es sin duda alguna, la mejor manera de ofrendar, y es a la vez la ofrenda clásica del Nuevo Testamento.

                                       Objetivo N°4

IV. Como Ofrendar en la Mayordomía Integral de la Vida: A la luz de lo que hemos comentado podríamos preguntarnos como debemos ofrendar. Vamos a mencionar cuatro puntos indispensables que deben existir en nuestras ofrendas:

a. Con sentido de adoración: Esto es de fundamental importancia, debemos recordar uno de los puntos mencionados al hablar del diezmo: reconocimiento. Debemos llegar a la presencia de Dios con ofrendas en sentido de adoración, diciendo en su presencia: "Gracias mi buen Dios, por las otras partes que han quedado en mi hogar y que forman el cien por cien de lo que tu me has dado", la ofrenda debe ser parte del culto de adoración, en donde le sea permitido al miembro de la Iglesia dar publico testimonio de esa gratitud. Levantamos ofrendas en los templos (no colectas) como testimonio ante el mundo de que somos mayordomos de Dios y administramos sus bienes dados temporáneamente en nuestro poder. Debemos levantar ofrendas en nuestros cultos para dar testimonio al mundo de que nuestras Iglesias se mantienen con la sabia administración de la mayordomía de cada miembro.

2. Con Espíritu de Sacrificio: Debemos ir a la presencia de Dios con ofrendas que en verdad demuestren espíritu de sacrificio. Nuestras sobras no agradaran a nuestro Dios. El secreto para ofrendar con sacrificio esta dado por el apóstol Pablo en el pasaje mencionado anteriormente; es darse primero al Señor. Es innegable que quien ha aprendido a dar sus dones, su tiempo, su todo al Señor, no tendrá reparo en ofrendar con sacrificio.

3. Cumpliendo una Misión: Nuestra ofrenda, aparte de formar parte de la adoración, lleva el propósito de posibilitar la realización de las tareas de la Iglesia. En ese sentido, Dios nos usa para que seamos instrumentos, medios por los cuales el dinero llegará a la Iglesia. En la medida como cada miembro comprenda ésta responsabilidad, será el progreso y afianzamiento de la obra.

4. Superando a la Ley: Seria muy triste que quienes han recibido tantas bendiciones del Señor, estuviésemos debajo de la Ley. Nosotros éramos gentiles y Dios nos llevó a su redil; estábamos en el pecado y Dios nos dio vida juntamente con Cristo. El infierno era nuestro destino y Dios lo transformó en cielo. Dios nos redimió y nos compró al precio de la sangre de Cristo. Tenemos muchos motivos para agradecer a Dios su amor y su misericordia. Él nos ama y si le amamos nosotros, iremos nosotros delante de un pueblo que debió vivir bajo la ley; no seria correcto. En demostración del amor que tenemos hacia el Maestro, nuestras ofrendas han de ser generosas, superando el diezmo con sacrificio, si es necesario, pero demostrando a Dios que le amamos y que deseamos demostrarlo.

Es posible que existan muchos creyentes que aun no han aprendido a diezmar. A ellos les aconsejamos que prueben y verán las bendiciones de Dios llegar a sus vidas en forma tal que se sorprenderán. Aquellos que ya estén ofrendando el diezmo, procuren superarlo y verán como Dios también sobreabunda.

Las necesidades de la obra son tremendas, pues hace falta dinero para todas las cosas. ¿Quién traerá el dinero a la casa de Dios? ¿No usaremos nuestra capacidad, dones y talentos para obtener el dinero con dignidad y aportarlo a la Iglesia, para hacer frente a esas necesidades? El dinero está en el mundo y Dios nos dará capacidad e inteligencia para ganarlo, si es que estamos dispuestos a obtenerlo para su reino. La Mayordomía integral de la vida hará que nuestras ofrendas sean en verdad aceptas al Señor. Las daremos con alegría, con reconocimiento, con sentido de adoración, superando a la ley, permitiéndonos comprobar que haremos muchos mas con el ochenta o el noventa por ciento de nuestros bienes que con el cien por cien.


CUESTIONARIO:
  
Para meditación, estudio y evaluación responda las siguientes preguntas:

1. - ¿Cómo eran las ofrendas antes de la ley?

2. - ¿Qué determinó la ley en cuanto a las ofrendas?

3. - ¿Qué nos muestra el Nuevo Testamento en relación con las   ofrendas?

4. - ¿Qué nos aconseja ofrendar el principio de la Mayordomía   integral de la vida?

1   ¿Qué es el Diezmo?  Lev. 27:3O
    Es la décima parte del ingreso,
    Es cosa dedicada a Jehová 

2   ¿Quién ordeno el Diezmo? Gen.14:2º,  Deut.14: 22,  Mal.3:6,7.
    Dios.

3 ¿Podemos rehusar los diezmos y ofrenda a Dios?  No   Mal.3: 8,9.

4  ¿Estamos libre de diezmar y ofrenda porque no estamos en la  Ley? No porque 4OO años ante de que Moisés recibiera la  Ley el Patriarca Abraham baluarte de la fe recibió, de  parte de Dios el principio de Diezmar y no Moisés representante de la ley Gen.14: 18 a 20. Hebreos 7:1 a 10.
   Y así mismo Jacob. Gen.28:22

5 ¿Qué sucede con el que no Diezma?
   Malaquías 3; 8 a 9 Roba a Dios (es ladrón).
   1 Corintios 6:1O No heredarán el reino de Dios.
   El que hace tesoro para sí es un necio Lucas 12:16 a 20.

6. - Cuando Diezmamos demostramos su Señorío en nuestra vida  por serle Obediente a 
       sus  palabras Malaquías 3:19,   1 Corintios 6:10.

7. ¿Dónde se llevaba los Diezmos en el Antiguo Testamento?  Mal.3:1o; 1 Corintios 16: 1           
     -2  (alfolí)

8. ¿Por qué debemos traer los Diezmos a la Congregación Local?

    Mal. 3:10;  1 Cor. 9:14;  Lucas 10:7;  Gen.14:18-20; Hebreo 7


9. ¿Qué es Ofrendar?  Es Obsequiar ó dar algo en agradecimiento, tanto material  como
     espiritual
    Marcos 12:41-44; Lucas 21:1-4.


10. ¿Debemos dar solo cuando sentimos que Dios nos impulsa o  dirige hacerlo? ____? 
     Tiene fundamento Bíblico? ____ 
     1 Corintios 16:2
     a.- El primer día de la Semana
     b.- Ponga aparte algo según haya prosperado

11. ¿Cómo se Administraba la ofrenda y Diezmo? Hechos 6:3-7; Distribución diaria;
         para servir a las mesas 
        Proverbios 19:17; Romanos 12:13.

12. ¿Quién tuvo la responsabilidad de vigilar el gasto de las Ofrendas en la Iglesia
        Primitiva? Hechos 4:35
        Los Apóstoles; y esto lo distribuía ó los repartían a cada uno según su necesidad.

13. ¿Cuál fue el resultado de traer su ofrenda? Hechos 4:34; Malaquías 3:10;
        2  Crónicas 31:10.

14. ¿El Obrero puede participar de las Ofrendas para vivir y 
       Alimentase ____ 1 Cor. 9: 11-14 El que anuncia el evangelio que viva del evangelio, 
       por el Obrero es digno de su  salario Mateo 10: 10; Lucas 10:7;  1 Timoteo 5:18.
       2 Crónicas 31:4.  y  así dedicase a la predicar y enseñar.

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